Golea y asiste, marca diferencias y no deja de tensar la cuerda hasta conseguir ser considerado el número uno del PSG primero y del mundo después. La negociación para renovar su contrato está congelada ya que ni el futbolista ni su padre tienen pensado mover ficha situando un salario superior al de Neymar y cercano al de Leo Messi como punto de partida.

Neymar cobra 36 millones de euros brutos al año como salario. Mbappé no llega a los 20 millones mientras Messi está en los 100 millones anuales por los 60 de Cristiano Ronaldo. Mbappé quiere 50 millones brutos anuales y que el PSG le permita quedarse con dos tercios de los ingresos por publicidad. Las cifras dificultan la operación, pero nadie duda de que Kylian será el próximo número uno mundial tras Messi y Cristiano ya que Neymar sigue siendo víctima de sus propias distracciones.

El Madrid no mueve ficha, pero Zidane sabe que el jugador por el que apostar no es Pogba sino Mbappè. El precio de traspaso será de 250 millones de euros más otros 50 en variables con un salario para el jugador de 50 millones de euros aunque el precio de traspaso podría verse menguado con la entrada de algún jugador. Mbappè coge distancia, Tuchel tiene frentes abiertos por todos los lados y del rendimiento del PSG en Champions dependerá el futuro de un Mbappè que no permite una.